[Análisis] Jusant – El arte de escalar
Este análisis se ha realizado en base a la versión de Jusant para Xbox Series X/S gracias a Xbox Game Pass.
Este ha sido un año plagado de buenos títulos y otros muy interesantes, llama mucho la atención la cantidad de juegos que se disputaron por el GOTY. Sin embargo, más allá de los grandes lanzamientos AAA, hubo muchos títulos que no hicieron tanto eco, pero que entregaron al público una propuesta diferente que juguetea y experimenta con sus mecánicas. Jusant, es uno de ellos. Desarrollado por el estudio de origen francés, DontNod -los mismos que hicieron la franquicia Life is Strange-, propone una mirada más refrescante del viaje del héroe a través del arte de escalar. Acompáñame a navegar por una antigua civilización hasta subir a la cima de una gran montaña, junto a nuestro amiguito hecho de agua.
Restos de una civilización
Jusant empieza con nuestro protagonista llegando a las faldas de una inmensa montaña. Él o ella, la verdad nunca se da a entender su género, es acompañado de una criatura azul. Yo lo llamó “bolita de color azul adorable”. Al principio de los créditos iniciales nos cuentan que la palabra Jusant significa marea menguante. Eso quiere decir que una gran sequía ha asolado el mundo retirando todo rastro de agua que había en la superficie. Y cuyos habitantes fueron obligados a abandonar sus casas, su hogar; esa relación pueblo y montaña ya no existe más.
Ni bien llegamos el o la protagonista comenzará a ascender con una voluntad inquebrantable de llegar a lo más alto. Esa decisión no se verá afectada, porque existe ese deseo de llegar a lo más lejos a pesar de los peligros que nos depara esta colosal montaña que destella un aura sobrenatural. El juego nos explica que para poder escalar debemos utilizar los gatillos del mando. Estos servirán como las manos de nuestro protagonista.
Instrucciones para subir una montaña
Para subir una montaña se comienza por levantar las manos y agarrarse de una saliente. Lo primero que llama la atención es que los gatillos al mantenerlos presionados nuestro personaje se mantendrá agarrado en una roca o de cualquier superficie con agarre. Si dejas de mantenerlos tu personaje también lo hará. El meollo del asunto es ir intercalando entre tus dos manos (los dos gatillos). Mientras mantienes presionado uno de ellos la otra mano buscará por dónde agarrarse.
Conformes avanzas, se irán agregando nuevas mecánicas para dificultar un poco la escalada. Una de ellas es la barra de estamina. Está se irá reduciendo por el esfuerzo que conlleva esta actividad. Y no solo eso, tu cuerda tiene un límite, puesto que está anclada en un punto de agarre principal. Para paliar esta problemática puedes ir colocando pistones y cuando te quedes sin energía solo basta con descender en la soga hasta el punto de agarre inicial. Cuando retornes tu barra de energía se recuperará y ya podrás continuar con tu aventura. Habrá plataformas que iremos desbloqueando y solo con colocar nuestra cuerda podremos regresar en un punto muy atrás ya sin hacer todo ese trámite de colocar pistones.
La montaña y sus secretos, además de sus peligros
Esta colosal montaña oculta muchos secretos. Entre ellos cartas, monumentos y templos. El entorno delata un paisaje onírico y místico, que invita al jugador a involucrarse en su narrativa ambiental, porque son sus decorados los que te cuentan algo. Encontrar sus secretos nos va revelando más de la identidad que alberga este sitio y de sus habitantes. Nuestro amiguito de color azul adorable tiene peliculares habilidades que nos va dando pistas de dónde posiblemente pueden estar estas ruinas o lugares interesante por descubrir.
También posee la habilidad de provocar un efecto en el entorno, como hacer crecer los tallos de una flor gigante que nos servirá para escalar. Otro objeto que se ve afectado de forma propositiva es brotar unas plantas con pequeñas salientes para poder agarrarse de ellas. No obstante, muy avanzado en tu viaje habrá sitios donde el sol, que cumple un papel de antagonista, va desgastando al protagonista en la escalada. Te cansarás más rápido, y no conforme con eso las plantas se marchitarán. Otros peligros ambientales en Jusant está el viento y la ventiscas que debilita al viajero o viajera. La barra de energía se ve reducida rápidamente por los fuertes golpes de este enemigo invisible.
Espacios de ensueño
Jusant alberga diferentes biomas que harán de la aventura un hermoso y mágico viaje audiovisual. Su fuerte es la mecánica de la escalada, de eso no hay duda. Pero, pasear por estos lugares orgánicos y raros a la vez, es maravilloso. Su dirección de arte recuerda mucho a los trabajos de Fumito Ueda, en especial Ico y The Last Guardian. Esa puesta en escena de vestigios de alguna civilización antigua o ruinas desoladas hace que el aislamiento y el misterio logre seducirnos.
Nuestro personaje nunca habla, pero eso se ve recompensado con una gran banda sonora. Su música es relajante y nostálgica, y que en algunos puntos de la aventura llega a ser muy emotiva. Por ejemplo, ese momento donde corremos en un puente la cámara se va alejando para ver nuestra pequeña silueta en un gran encuadre general. Una vista que captura un hermoso paisaje solitario que bien podría haber sido hecho por el mismo Giorgio de Chirico.
Ascensión
Jusant es una experiencia sensorial que usa la escalada como resolución de problemas de forma muy armónica. Quiero decir, que demuestra que esta actividad se siente viva. No hay ningún script que sirva como transición para interrumpirlo. Todo es en tiempo real. Superar un obstáculo y ver que tu personaje le empieza a cansar los dedos por agarrase tanto tiempo es darle peso a tu viaje. Tu travesía al pasar por diferentes biomas resulta ser gratificante a nivel de mecánicas. La experiencia de juego es por medio del control y no a través de escenas que aspiran a lo cinematográfico.
El juego tiene sus peros. Se puede decir que estamos en una etapa muy temprana del Unreal Engine 5, puesto que nuestro protagonista se quedará atascado en algunas zonas como un montículo de piedras o una protuberancia en la tierra. Para ser un juego donde le da mayor importancia a la actividad de escalar me faltó más peligros ambientales. Los que hay no son tan desafiantes y el juego puede resultar muy fácil. A nivel narrativo tenemos un problema, cuando abusa demasiado del recurso de los textos. Si no exploras el entorno y vas de frente a completar la aventura te habrás perdido del contexto que rodea al título.
Merci, Don’t Nod
Jusant es probablemente una de las grandes sorpresas de este año junto a Cocoon. Su propuesta del uso de los gatillos hace de la aventura una maravillosa experiencia. Cumple con su cometido, ser un viaje de ensueño. Además de presentar un estilo artístico que recuerda mucho a la visión del mundo de las obras de Fumito Ueda. Asimismo, despertar esa sensación de diversión en las mecánicas como la actividad de escalar, muy similar a la caminata en Death Stranding. Si te gustó Journey o Grow Home, este es tu título. Muy recomendable.
Lo bueno:
- El uso de los gatillos son una extensión más del jugador.
- La puesta en escena es maravillosa y denota un gran apartado de ensueño
- La banda sonora es muy emotiva
- El viaje de nuestro personaje se siente vivo gracias a sus mecánicas de escalado
- Si te gustan juegos sensoriales como Journey o Abzu este es tu juego
Lo malo:
- Unos cuantos problemas de pulido en algunas zonas como las superficies.
- Depende mucho de la narrativa tradicional por texto. Si no eres muy curioso en explorar el entorno no conocerás el contexto de la historia.
- Falta mas peligros ambientales, los pocos que tiene hacen de la aventura de escalada en una muy fácil de superar.
